Durante 2021, finalizaron su proceso neurorrehabilitador especializado e intensivo 393 pacientes adultos con daño cerebral, de los cuales el 22% era de origen traumático (TCE, traumatismo craneoencefálico), el 52% de origen vascular (MVC, enfermedad vascular cerebral) y el 26% derivado de otras patologías. Su edad media ha sido de 50 años y la mayoría de los pacientes son varones (62%).
Tipo de lesión | Pacientes |
Traumatismo cranioencefàlico | 88 (22,4%) |
Enfermedad vascular cerebral | 204 (51,9%) |
Otras causas de daño cerebral | 101 (25,7%) |
Total | 393 (100%) |
Población per genero
El nivel de estudios más frecuente entre la población atendida es la secundaria (47%), seguido de estudios superiores y primarios.
Entre los pacientes dados de alta el pasado 2021, sólo el 4,2% fueron reingresos por complicaciones (previas a los 2 años desde el alta asistencial). Las principales complicaciones dadas derivadas de la discapacidad han sido de carácter traumático.
A continuación se presentan los resultados de los pacientes que el año 2021 finalizaron su proceso neurorehabilitador en el Institut Guttmann y que son mayores de 16 años.

Situación psicosocial
Una vez finalizado el proceso rehabilitador, el 91% de los pacientes regresa a su domicilio oa un nuevo domicilio, sólo un 9% ha requerido una alternativa institucional de carácter transitorio o definitivo. Este porcentaje está en torno a lo que se viene manifestando en los últimos años (media del 89%).
Si analizamos la situación de convivencia en el ingreso y en el alta, se observan algunas variaciones. Aumentan los casos de las personas que vuelven a vivir con sus padres u otros familiares cercanos después del alta y se incrementan especialmente aquellos casos que deben ingresar en una institución. Por otra parte, disminuyen los casos de convivencia con la pareja, así como las personas que viven solas.
Por otra parte, evaluamos la valoración sociofamiliar del paciente, que nos ayuda a detectar situaciones de riesgo social y realizar una intervención adecuada a las necesidades sociales de cada paciente. Según datos del año 2021, en el 49% de los casos ha mejorado la situación sociofamiliar del paciente en alta, en el 42% se mantiene y en el 9% empeora.
Mejora de la autonomía funcional
Para medir y evaluar la mejora de la funcionalidad, es necesario distinguir entre:
TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO
De los 88 pacientes con traumatismo craneoencefálico (TCE) atendidos por tratamiento y rehabilitación, el 76,5% presentaba al ingreso una afectación grave según la Glasgow Coma Scale. Su edad media era de 44 años.
Una de las escalas de valoración de severidad que utilizamos es la Disability Rating Scale (DRS). De acuerdo con los resultados obtenidos, podemos afirmar que nuestros pacientes han pasado de una discapacidad grave al ingreso a una discapacidad moderadamente grave en alta, con una mejora de 6,35 puntos de media.
ENFERMEDAD VASCULAR CEREBRAL
Los 204 pacientes que han recibido el alta clínica por enfermedad vascular cerebral tenían una edad media de 54 años. Para valorar su funcionalidad, se administra la escala de Barthel, donde se ha obtenido una mejora media de 34 puntos al alta del paciente respecto a su ingreso. Si observamos cómo se distribuyen las medias en la siguiente figura, nuestros pacientes han pasado de una dependencia grave al ingreso a una dependencia moderada al alta.
En los últimos años, se ha incrementado la mejora media en la capacidad para realizar las actividades de la vida diaria (AVD) en alta. La media de mejora se sitúa en torno a los 28 puntos en los últimos 4 años, elevándose hasta los 34 puntos en 2021.
OTRAS CAUSAS DE DAÑO CEREBRAL
Han finalizado el proceso rehabilitador 101 pacientes con otras causas de daño cerebral no traumático, derivado de tumores, anoxias, infecciones, etc. Su edad media ha sido de 49 años.
En relación a la funcionalidad alcanzada, en la siguiente figura se muestra cómo nuestros pacientes consiguen una mejora del nivel funcional, tanto en el área cognitiva como en la motora (valoradas con la escala FIM). En la valoración total, se obtiene una mejora de 17 puntos del alta respecto al ingreso.
Por último, otro indicador relacionado con la mejora de la funcionalidad, es el hecho de que el 81% de los pacientes que ingresaron con cánula de traqueotomía consiguieron marcharse de alta sin cánula.